Nueve años después de un atraco frustrado en Ludendorff (North Yankton), que dejó a uno de sus perpetrantes muerto, otro bajo arresto y obligó a un tercero a la clandestinidad, el exladrón de bancos, Michael Townley, fue tomado como muerto en North Yankton y ha sido puesto bajo protección de testigos por el agente corrupto del FIB Dave Norton, amigo íntimo del mismo, trasladándolo así con su familia a Los Santos (San Andreas) con una nueva identidad: «Michael De Santa». A Franklin Clinton, que trabaja como embargador de vehículos en un concesionario de coches, junto con su amigo Lamar Davis, se le pide recuperar un vehículo perteneciente al hijo de Michael, Jimmy, quien está atrasado en el pago de su adquisición.